miércoles, 30 de enero de 2008


Y una libertad especial que me tiñe, que me lleva, que me guía, que me llena, y esa libertad en ti, y el mundo cantando en ti, y la necedad del ciego sin darse cuenta de la vida es Dios, de que el pecado es no vivir, la necedad que repite sus mentiras y su religión, y el pecado es no vivir, y ando lanzado ya a un nuevo modo de ser, me he cansado de ser diplomático, me he cansado de ser agradable, cuando hagan daño a quien quiero, me vengaré, cuando hagan daño a quien vale para mí, a quien me apoya, me vengaré, y digan lo que digan esta es la caridad bien entendida, esta es la vida bien entendida: hacer lo que siente, el sentimiento es Dios, la gente se escuda en la mentira de la religión para no hacer a menudo lo que Dios dicta en el sentimiento, pero Dios no habla en la religión: habla en lo que sientes, y lo que a ti te puede parecer tremendamente injusto y tremendamente arbitrario, si el sentimiento lo dice es la verdad, y ya no hay mentiras, ya no hay cobardías: si nos hacen daño, a por ellos, si nos atacan, a por ellos, si se aprovechan de nuestra nobleza y de nuestra bondad, a por ellos, ya no hay cobardías, y ya estoy hasta la coronilla de tanta estupidez.

Amor




(c) del texto: Santiago Tena, 2008.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

si hacen daño a los míos, a por ellos

:)

amor

LuLLy, reflexiones al desnudo dijo...

Desde mi blog: Reflexiones al desnudo
Te reitero, hay que tener personalidad y carácter, ese que nos lleva a ser humanos, nobles pero no débiles.

Besitos amistosos!1

Anónimo dijo...

Igual opino Santi, a por ellos, sin distinción.
Gracias por tu colaboración.

Lágrimas de Mar dijo...

estoy de acuerdo con lully, nobles pero no débiles

un beso grande

lágrimas de mar

Berta dijo...

A estas alturas solo hay leyes para romper, para moldear a conveniencia, normas y pautas para saltarse, todos sabemos como tenemos q actuar, y responder.
Las mentiras del pasado ya se han puesto en evidencia. Nos queda la integridad de cada uno, aprendido de nuestros errores mayormente, y si nos hieren saltan las alertas y activamos las protecciones pero no nos vengamos pues no forma parte de nuestra manera de ser y sentir.
Como bien dices ya no hay cobardías, somos valientes... reflejo del miedo.

Besos ;)